Un día de cojones. Aunque reconozco que no madrugué precisamente. Aun así, todo el día para arriba y para abajo. Hoy, para resumir, estuve en lugares tan equidistantes como (y en orden
cronológico): la casa de la cultura del Arroyo de la miel, el Área de la juventud, Pedregalejo, la plaza de La Merced, la plaza de la constitución, la universidad de Málaga (que ya me hubiera valido saber que ningún profe iría), El Cónsul, la plaza de la constitución, el Yelmo de la estación de trenes, para acabar de nuevo en casa.
cronológico): la casa de la cultura del Arroyo de la miel, el Área de la juventud, Pedregalejo, la plaza de La Merced, la plaza de la constitución, la universidad de Málaga (que ya me hubiera valido saber que ningún profe iría), El Cónsul, la plaza de la constitución, el Yelmo de la estación de trenes, para acabar de nuevo en casa.
Lo mejor del día, sin duda ha sido haber visto “Pina” una película alemana, que en realidad viene a ser un homenaje en forma de documental a la bailarina y coreógrafa Pina Bausch. Y que sorpresa y que momento más bonito viví al encontrarme con la canción “Luna de Margarita” de Simón Díaz entre su banda sonora, coreografiada y todo. Broche de oro para un día agitado. Y en 3D.
Reflexión del día: necesito un bonobús mensual ilimitado.
PD: El título de este post es un homenaje al cantautor venezolano Simón Díaz.
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